20/09/2018

Iniciativa de los estacioneros de Cuyo para que la gente pueda gastar menos. Además, las tarjetas lanzarían plan para financiarlo hasta en 18 cuotas. 

Los empresarios del sector de los combustibles de la zona de Cuyo, propusieron a los gobiernos provinciales de San Juan, Mendoza y San Luis, financiar la compra de equipos de GNC para hacer frente a la crisis económica.
La disparada en los precios de los combustibles líquidos y la posibilidad de proveer a la zona con gran cantidad de gas a buen precio, impulsó a los empresarios del sector a plantear la iniciativa, según indicó el sitio Surtidores.
Los empresarios cuyanos, reunidos en CECHA, comenzaron una serie de reuniones con diferentes funcionarios y directivos del área económica de las provincias, para unificar criterios y voluntades que le ofrezcan al consumidor facilidades de financiación a la hora de instalar un equipo de gas en el vehículo. Una de las propuestas es ofrecer líneas de financiamiento accesible fondeadas con recursos del área de juegos.
A su vez, los empresarios esperan concretar en pocos días una serie de encuentros de trabajo con directivos de las dos principales entidades de tarjetas de crédito de la Región de Cuyo, “Nevada” y “Data 2000”, para el lanzamiento de financiación específica de instalación de equipos de 4ta y 5ta generación, en cuotas, ya sea 6, 12 ó 18, a tasa de intereses razonables.

20/09/2018

El mes pasado hubo más de 15.000 vehículos que incorporaron el equipo de gas. Es el número más alto desde marzo de 2016. 

El aumento constante del precio de la nafta y del gasoil volvió a disparar la demanda de instalaciones de equipos de GNC en vehículos particulares. Al mayor costo del combustible, se suma la devaluación del peso, que precipitó a los conductores a convertir sus autos a gas antes de que suba el precio de los equipos.
La diferencia entre el valor de las naftas y el GNC superó su máximo histórico, lo que multiplicó exponencialmente las consultas para hacer las conversiones.
Según datos del Ente Nacional Regulador del Gas, en agosto se convirtieron 15.799 vehículos a gas natural comprimido en todo el país, un 84 por ciento más que en el mismo mes del año pasado (8.590) y un 25 por ciento por encima de julio (12.622).
Es la cifra más alta en lo que va de 2018. Desde marzo de 2016 (15.977) que no se superaban las 15.000 operaciones. De esta manera, el acumulado anual llegó a 88.250 conversiones. Frente al período enero-agosto de 2017 (58.085), el crecimiento es del 52 por ciento.
La renovada preferencia por el GNC se sustenta en la creciente brecha, en término de precios, que hoy separa al metro cúbico de gas respecto del litro de nafta. Mientras que en la Ciudad de Buenos Aires el metro cúbico cuesta alrededor de los 14 pesos, el litro de nafta súper está en torno a los 40 pesos.
Llenar un tubo promedio de GNC -12 metros cúbicos, 60 litros- sale unos 168 pesos. En cambio, cargar un tanque de 45 litros con nafta súper implica desembolsar unos 1.500 pesos. Con 12 metros cúbicos de GNC se pueden recorrer unos 120 kilómetros.

Respaldo del gobierno

El Ministro de Energía brindó un nuevo respaldo a la industria del gas natural comprimido, al firmar la resolución del marco regulatorio (resolución 104/2018) para que, tras una década, Argentina vuelva a exportar gas a Chile.
La resolución es una excelente noticia para el sector ya que asegura el abastecimiento interno, dejando de lado posibles restricciones en el suministro, como ocurrió años atrás.

20/08/2018

Entre enero y junio hubo más de 60 mil vehículos convertidos para funcionar a gas natural comprimido. 

El aumento en el precio de los combustibles líquidos vino acompañado por otro fenómeno en 2018: en el primer semestre creció un 45,8% la cantidad de vehículos convertidos a gas natural comprimido (un total de 60.025 vehículos).
El período enero-junio de 2017 cerró con 41.156 conversiones, según datos del Enargas; es decir, 18.869 por debajo del primer semestre de este año. En lo que va de julio, ya hubo 4.292 autos a los que se les instaló un equipo de GNC.
El motivo principal por el que este año subieron las conversiones es el bolsillo: cada vez es mayor la diferencia entre los combustibles líquidos y el GNC.
La nafta súper en la Ciudad de Buenos Aires cuesta $28,1 por litro, mientras que las estaciones de gas porteñas venden el GNC a $12,17 por metro cúbico, según cifras del Ente. Por lo que, en CABA, el gas llega a ser un 43% más económico que la nafta.
En enero, el GNC en la Ciudad de Buenos Aires costaba, en promedio, $9,64. El aumento durante el primer semestre fue del 26,2%. La nafta, en cambio, aumentó en torno al 18% en el mismo período. El gas más barato se consigue en Chubut ($11,74) y Tierra del Fuego ($12).
La provincia de Buenos Aires lideró el primer semestre en materia de conversiones de autos a GNC, gracias a 28.818 instalaciones (casi el 50% del total en el año). La siguen Córdoba (9.512), Santa Fe (5.460), Tucumán (2.900) y Ciudad de Buenos Aires (2.782).

20/08/2018

El Gobierno dispuso habilitar la importación de vehículos de gran porte propulsados a gas comprimido. Como paso previo, propuso a entidades empresarias que se expresen sobre esta medida. 

A través de una resolución del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), publicada en el Boletín Oficial, el Poder Ejecutivo invitó a las licenciatarias del servicio de distribución, a los organismos de certificación, a la Asociación de Fabricantes de Automotores (ADEFA), a la Cámara de Importadores, y a las empresas Scania e Iveco, a expresar opiniones y propuestas sobre el procedimiento para la habilitación de vehículos importados propulsados a GNC.
Para ello, estableció un plazo de 30 días para que esas entidades y compañías efectúen formalmente sus comentarios y observaciones, que no tendrán carácter vinculante para la autoridad regulatoria.
En la resolución se recuerda que el denominado “Procedimiento para la habilitación de vehículos importados, propulsados mediante el uso del gas natural como combustible”, apunta a la necesidad de generar un marco normativo que respalde la eventual habilitación de los vehículos importados.
En esa iniciativa, según la resolución, se prevé la creación de nuevas figuras con el carácter de “Sujetos del Sistema”: el importador de vehículos propulsados mediante el uso de gas natural como combustible, su correspondiente Representante Técnico, los Centros de Verificación y Comercialización de los vehículos en cuestión, y su Representante Técnico, “susceptibles de ser controlados y eventualmente sometidos a procedimientos sancionatorios”.
La norma tiene como antecedente una disposición de la Subsecretaría de Tránsito y Transporte de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que establece la creación del “Programa de Prueba Piloto de Buses de Combustibles Alternativos”, a implementarse con promoción de políticas, planes y proyectos de ordenamiento y mejora del sistema de transporte de pasajeros y de carga.
Además, se suma el requerimiento de Iveco Argentina, sobre la adecuación de las reglamentaciones vigentes para la habilitación de la importación de vehículos diseñados y producidos para ser propulsados a GNC.
Por otro lado, el Enargas estableció que la participación del público en general en la consulta del proyecto, contribuirá a “dotar de mayor transparencia y eficacia al sistema”.

¿Qué opina el sector?

Desde la Cámara que agrupa a los fabricantes de equipos de conversión, aseguran que la resolución abrirá las puertas a un crecimiento beneficioso para todo el sector.
En ese sentido, consultado por el sitio Surtidores.com, el presidente de la Cámara de Productores de Equipos Completos (CAPEC), Hugo Lamy, mostró una actitud positiva hacia las posibles implicancias de una política de Estado que favorezca al GNC.
“Esperamos que a medida que la gente vea circular los camiones y colectivos más modernos del mundo en las calles argentinas propulsados a GNC, cambie el concepto popular relacionado con el ahorro energético y el cuidado del medioambiente”, dijo Lamy.
Agregó que “quienes apuesten a la industria de motores pesados a GNC deberán elevar la vara de la tecnología, para poder igualar los avances que vendrán de los países más desarrollados y de esa manera, la inversión y la capacitación tenderán a lograr la excelencia que hace punta en el primer mundo”.
Para Lamy, la propagación de vehículos pesados con GNC bajará los costos de toda la economía en general y será una inyección de confianza que brindará amplio futuro a los estacioneros del sector y a los fabricantes.
Por otro lado, desde las estaciones de servicio no observan resultados concretos que los beneficien de manera directa, sin embargo, consideran que con el tiempo puede contribuir a un crecimiento general de la actividad.
La gran mayoría de los establecimientos instalados en las ciudades no tienen una capacidad estructural que sirva para la carga de gas a vehículos de gran porte. Por ello, a medida que aparezcan estos vehículos en el país y, de acuerdo a las necesidades se vayan planteando, los expendedores deberán hacer las inversiones necesarias para captar estos nuevos clientes.

20/07/2018

A través de la resolución 124/2018 el Ente Nacional Regulador del Gas estableció nuevas reglas para estaciones de GNC, sin embargo aseguran que la reglamentación no afecta a los puntos de carga, pero sí a las distribuidoras. 

Desde la Cámara de Expendedores de GNC afirmaron que para las estaciones de servicio no cambia nada. Cuando las distribuidoras firman los contratos con las estaciones, deberían nominar el pedido de cuánto gas necesita para consumo diario. En la práctica, ninguna estación tiene que nominar nada. Las mismas distribuidoras absorbían los desbalances. “Lo que hizo el Enargas es blanquear una situación que ya se estaba dando”, expresaron desde la Cámara.
En el Anexo de la resolución se explica que las presentes pautas “tienden a una mayor seguridad, confiabilidad y velocidad de respuesta de los sistemas de transporte y distribución de gas, con el objetivo de preservar el abastecimiento de servicios de acuerdo a sus prioridades evitando las situaciones críticas de los sistemas”. Además se buscan evitar “las crisis recurrentes, que afecten a los sistemas de transporte y distribución en los días de máximo consumo, preservando a los clientes con servicios no interrumpibles”.