20/09/2021
Lo aseguró el vicepresidente de la Cámara de Expendedores de Gas Natural Comprimido (CeGNC), quien analizó el momento actual por el que atraviesa la industria en nuestro país y advirtió por las consecuencias generadas en el sector tras la llegada de la pandemia de coronavirus.
A comienzos de agosto, Pedro González, vicepresidente de la CeGNC, y Fernando Romain, director ejecutivo de la entidad, formaron parte del webinar “El GNC 37 años después”, organizado por el Mercado Electrónico de Gas (MEGSA). Durante la jornada virtual, los representantes de la Cámara realizaron un recorrido por la historia del combustible en Argentina y brindaron detalles acerca de las estadísticas más importantes de la actividad.
“Nos falta que a las instituciones y al gobierno de turno les interese realmente descontaminar y favorecer el uso del GNC. Tenemos la estructura, tenemos estaciones de servicio por todo el país y nos falta simplemente que exista la cantidad de vehículos necesaria para que el parque automovilístico crezca”, detalló González. “Es un presente difícil, y a pesar de que siempre tenemos expectativas, de alguna manera, no es un futuro demasiado alentador si realmente las cosa no cambian”, sostuvo el titular de la CeGNC.
Históricamente, el hito más relevante en los comienzos del combustible en Argentina fue producido en el 2007, cuando el país se ubicó en el primer puesto del ranking mundial debido a la cantidad de vehículos impulsados con GNC. Para ese entonces, la nación contaba con el 21.7% del total del parque automotor convertido.
Con el paso de los años y tras el desarrollo de la industria, en la actualidad el país cuenta con un total de 2022 estaciones de carga de GNC, alrededor de 1.750.000 vehículos que conforman su planta y aproximadamente 1400 talleres de instalación de equipos de conversión. Asimismo, la actividad está conformada por 50.000 puestos de trabajo directos y es el sostén de la subsistencia económica de casi siete millones de personas que utilizan el combustible para el desempeño de sus tareas laborales.
El monto de las inversiones realizadas por el sector privado para impulsar el crecimiento de la industria del GNC representa un total de 5000 millones de dólares, derivados en su totalidad del capital de pymes nacionales.
“El tema del no crecimiento que hemos tenido durante toda la existencia de la industria del GNC siempre ha estado relacionado con la falta de publicidad y con la falta de apoyo estatal. En cambio, en algunos países de Europa, por una cuestión de la contaminación, se considera que, más allá de lo nuevo que viene con los vehículos eléctricos, el GNC es la alternativa más viable para disminuir la problemática en este momento”, subrayó González.
Respecto al estancamiento registrado en los últimos años en el sector, González sostuvo: “En lugares como España, los vehículos salen de fábrica con el equipo de GNC instalado directamente. Creo que eso es algo que nos falta a nosotros, el poder comprar el auto ya equipado totalmente”.
Pese a los datos positivos que viene alcanzado el GNC en toda su historia en la Argentina, Pedro González, vicepresidente de la CeGNG, advirtió que el sector “está viviendo una situación bastante compleja”. Uno de los principales golpes se los dio la pandemia del COVID-19. “Esta última etapa de pandemia ha significado un deterioro en todas las cadenas productivas y de comercialización de distintos rubros, y nosotros no estamos ajenos a ello”, señaló el referente de los empresarios del gas natural comprimido.