20/05/2020

Pertenece a IEASA y está ubicada en el Parque Industrial de Neuquén. Una demanda judicial por fallas en su construcción mantiene paralizado el complejo desde el 2015.

La llegada del frío reforzó un problema que se registra desde hace años en Neuquén: la falta de garrafas. Por eso, el diputado del Frente de Todos, Mariano Mansilla, renovó el pedido de que se distribuyan los 50 mil envases que quedaron

abandonados en una planta del Parque Industrial de la capital provincial.
Las garrafas quedaron abandonadas luego de que cerrara una planta fraccionadora que nunca se activó. La obra pertenece a la ex-Enarsa, hoy Integración Energética Argentina (IEASA), en alianza con la cooperativa de servicios públicos CALF. La fecha de inauguración estaba prevista en diciembre de 2013, pero nunca ocurrió. Dos años después, un informe de la Universidad del Comahue detectó fallas estructurales, por las que el Estado demandó al arquitecto, Carlos Barbato, quien negó los cargos y presentó una contrademanda. En respuesta, la justicia dictó una medida de no innovar.
Ahora Mansilla volvió a dirigirse a IEASA, con una nota a su presidente, Andrés Cirnigliaro. En la misma consigna la situación de la planta y reanuda el pedido de que se distribuyan los envases abandonados, sin que la causa judicial sea una traba y teniendo en cuenta que las demandas se incrementaron en el contexto de la pandemia por el coronavirus.