20/08/2020

Advierte que el plan debería ser tratado junto al presupuesto 2021 e incluir la renegociación del contrato de importación de Bolivia que aún está pendiente.

El Instituto Argentino de la Energía General Mosconi (IAE Mosconi) consideró que el gobierno nacional debería replantear algunos ejes del Esquema Gas 2020/2024, donde se establecerá “un nuevo sendero creciente del precio del gas natural” que no estén relacionados con un valor competitivo para el mercado local y de exportación.


El IAE difundió un informe sobre el esquema que el Ministerio de Desarrollo Productivo planea lanzar en breve, para disponer un nuevo mecanismo de subastas competitivas, con contratos a cuatro años para la provisión de 70 millones de metros cúbicos diarios, a un precio máximo de 3,4 dólares por millón de BTU.
El Instituto, presidido por el ex secretario de Energía, considera que un “plan de promoción a la producción de gas natural debería tener como objetivo explícito alcanzar precios competitivos tanto para el mercado local como con destino a exportación”.
“En función de ello debería ser replanteada la idea de admitir un nuevo sendero creciente del precio del gas natural que no esté relacionada con dicho objetivo”, sostiene y resalta que “resulta necesario ajustar los incentivos tanto a la oferta como a la demanda, y antes de implementar un Plan de Subastas como el propuesto (en el plan) despejar incertidumbres en relación con la renegociación del contrato con Bolivia y la conformación de la oferta de gas”.
Por último, el IAE afirma que la aplicación y el compromiso de fondos públicos a través de la implementación de un Fondo Fiduciario con horizonte a cuatro años debería ser debatida en el marco del Presupuesto Nacional 2021. “Lo que representa un motivo de suficiente magnitud para postergar la subasta prevista para septiembre próximo”, subraya.
Si bien coincide en la conveniencia de recurrir al mecanismo de subastas en bloque por cuatro años, diferenciando la demanda base de la del pico estacional de invierno, el IAE plantea cuestiones relacionadas al diseño e implementación. “El proyecto oficial omite formular requerimientos de aumento en la productividad que se reflejen en baja de costos de producción que permitan alinear en un plazo mediato los precios domésticos con los del mercado de referencia (Henry Hub), sino que por el contrario los precios internos aumentarán”, dice.
En ese sentido, analiza que establece un esquema de precios máximos a valor presente que surgiría luego de descontar los precios futuros ofertados, lo que podría determinar “un sendero de precios crecientes en los próximos años. La tasa de descuento de los precios futuros del 10% anual en dólares, si bien podría reflejar la actual coyuntura, perpetúa innecesariamente un sobre costo que finalmente pagarán los usuarios vía precios o vía subsidios”.
“Existen interrogantes en torno al costo fiscal de esta medida, en particular en un entorno de congelamiento tarifario y alta inflación”; en consecuencia, “en los próximos años se pueden comprometer recursos fiscales no disponibles”.