05/05/2020

Representantes de las subdistribuidoras de gas por redes se reunieron por videoconferencia con autoridades del Ente Nacional Regulador del Gas, para evaluar los problemas que enfrenta el sector.

Las subdistribuidoras de gas de todo el país, 80% de las cuales son cooperativas, mantuvieron una reunión por videoconferencia con representantes del Enargas, para analizar los problemas del sector vinculados a los breves plazos de pago de las facturas y las altas tasas de interés, a lo que suman la caída de la recaudación y la ruptura en la cadena de pagos.

Del encuentro participaron el interventor del Ente, Federico Bernal; el presidente del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (AES), Mario Cafiero; la senadora María de los Ángeles Sacnun por Santa Fe

; el senador Oscar Parrilli y el diputado Carlos Alberto Viveros, ambos por Neuquén; y más de 40 representantes de las subdistribuidoras de gas por redes de todo el país.

La reunión giró en torno a la problemática y dificultades en la operatoria del servicio y en los problemas económicos y financieros que sufren las subdistribuidoras, y en especial las que son coooperativas, problemas que se profundizaron por el aislamiento social, preventivo y obligatorio.

En el encuentro, Bernal señaló la excepcionalidad de la situación, que afecta a todos y explicó que, para una mejor gestión “se ha creado una Gerencia de Protección de los Usuarios en el ámbito del ENARGAS”.

Por su parte, Cafiero, señaló que “el AES ha creado un banco de proyectos de la economía social que incluye a la expansión de redes de gas a las pequeñas localidades que aún no han podido acceder al servicio”.

En todo el país son 222 las localidades donde operan las subdistribuidoras. De ese total, 69 distribuyen GLP indiluído y 153 gas natural, y en conjunto operan 13.041 kilómetros de red que abastecen a un total de 505.742 usuarios.

Entre los problemas planteados se destacan los breves plazos de pago de las facturas a las distribuidoras y las altas tasas de interés por mora en el pago, a lo que suman la caída de la recaudación y la ruptura en la cadena de pagos.

Algunos representantes de las subdistribuidoras plantearon también las dificultades y limitaciones impuestas por los decretos 297/2020 y 311/2020 respecto de las actividades permitidas y habilitadas para ellas en el marco de excepción del aislamiento social.